EL PIRATA BARBANEGRA

Su reinado del terror duro apenas dos años (1716-1718), pero Barbanegra dejó tal impacto en la imaginación popular que es recordado hasta hoy. Su nombre era Edward Teach y nació probablemente en Bristol-Inglaterra. Teach impresionaba por su gran estatura, a la que añadía una imagen impactante; le gustaba mostrarse en publico con varias espadas, cuchillos y una pistolera con tres juegos de pistolas de diversos calibres. Para rematar, acicalaba su poblada barba oscura con mechas de cañón que le colgaban como adornos navideños y que encendía cuando estaba en combate. Quienes lo vieron luchar decían que se parecía al diablo, con su terrorífica mirada. Suele ser considerado como un personaje cruel y despiadado, sin embargo, hay versiones que indican que el aspecto adoptado por Teach era simplemente para impresionar a sus presas; y que, en general, no ajusticiaba a alguien a menos que él mismo no estuviera amenazado. Se inicio de marinero muy joven. En algún momento se unió al la tripulación del pirata británico Benjamin Hornigold, quien se retiro en 1716. Es allí, cuando Teach toma el mando y con su barco, el Queen Annes Reveng, navego a fondo el caribe y la costa atlántica de América del norte durante dos años. Su táctica favorita consistía en perseguir barcos mercantes, para abordarlos y apoderarse de todos los objetos de valor, comida, licor y armas que llevara. En junio de 1718, contaba con cuatro barcos grandes y 400 hombres. El 2 de diciembre de 1718, dos buques ingleses dirigidos por el teniente Robert  Maynard de la marina real sorprendieron a Barbanegra y sus piratas. Barbanegra lucho mano a mano con el teniente Maynard sobre cubierta, pero murió en el combate, y fue decapitado. Existen muchas leyendas e historias en torno a él, como que su cuerpo floto alrededor de la embarcación varias veces, después de ser tirado fuera de borda. así mismo de su cráneo, hay fuentes que afirman que fue usado como base para un cáliz de plata y se ha visto un fantasma por la zona de de Teach´s Hole buscando su cabeza...